La acción se desarrolla en un pueblo maderero con dos cabezas visibles: el alcalde (D. Crispín) y el cura (D. Silvestre) El cura recibe el encargo de Dios de construir un arca porque ha decidido enviar un nuevo diluvio universal y salvar a esa aldea. A partir de ese momento D. Silvestre deberá convencer a todos de su conversación con Dios y conseguir del alcalde, dueño de todo el potencial económico del pueblo, la madera para construir el arca. Todo se complica ante la negativa del alcalde, la llegada de una prostituta (Consuelo) a la aldea y la insistencia de la hija del alcalde (Clementina) por conseguir que D. Silvestre se fije en ella. 20 años después de representar este musical por primera vez, SILUETAS vuelve a sentir y a trasmitir la magia de este magnifico espectáculo que ya entre 1995 y 1999 presentaran en distintos escenarios de Castilla y León.